Hoy es nuestro gran día, y por ello hemos preparado todos los momentos con mucho esmero. Queremos que bebáis, cantéis y bailes junto con nosotros. Al final del día quedarán muchas ilusiones pendientes, pero esta, la nuestra, ya se habrá cumplido con vuestra presencia.
Tú has sido testigo de nuestros sentimientos, de nuestros besos, por eso nos gustará recordar que especialmente tú estuviste allí, que nos viste la cara de felicidad que teníamos, que sonreíste cuando nos mirábamos. Permítenos por ello, que te hagamos ya el siguiente encargo:
Guarda por nosotros todos los minutos de este hermoso día. Retén en tu memoria los momentos de este amanecer, cuando la viste por primera vez con su vestido de novia avanzar por el altar, y luego a él nervioso, estirarse la manga de la camisa como si quisiera romperla.
Acuérdate de la ceremonia, de los nervios que teníamos, de la emoción de nuestros padres...
Acuérdate cuando dijimos ?sí? y cuando lo repetimos con una emocionada sonrisa.
Acuérdate, junto con nosotros, del beso que nos dimos, de las risas de los amigos, de los abrazos, del arroz y del confeti que nos lanzaron.
Acuérdate del banquete, de las bromas, de las veces que nos pidieron que nos besáramos, del cava que bebimos y del vals de Amelie que bailamos.
Amigo nuestro, acuérdate de este día y ayúdanos a que sea inolvidable. Déjanos en este libro tus sentimientos, tus emociones o lo primero que se te venga a la cabeza. Las letras quedarán aquí escritas, pero el cariño con que lo has hecho quedará grabado en nuestro corazón.
Gracias por estar con nosotros ahora y siempre
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